TEMATICA DE AMALIA

Se ha dicho que Amalia constituye la primera novela argentina. Y si bien tal afirmación no es rigurosamente exacta, ya que desde el punto de vista cronológico hay algunas expresiones menores anteriores a la obra de José Mármol, lo es, sin duda, como expresión de calidad y madurez del género. La novela tiene interés para el lector actual, especialmente para el argentino, porque el autor ha elegido como tema de su relato un período crucial en la historia del país, la época de Rosas, haciendo de sus personajes más relevantes -no sólo el Restaurador o su hija Manuela, sino también de las figuras de segundo plano, familiares de Rosas, mazorqueros, etcéra- los motores de una intriga rica en peripecias y en momentos de riesgo que, si bien con las tintas recargadas de su antirracismo militante, articulan una crónica viva de la época. Las costumbres, el ámbito y los tipos de la Buenos Aires del rosismo ocupan en la novela particular importancia, evidenciando no sólo la plasmación del color local romántico sino también, desde la lectura de hoy y a pesar del antirracismo mencionado, una concreción literaria de real calidad. Se ha destacado más de una vez que Mármol eligió con acierto una de las más difíciles etapas del rosismo como marco histórico de Amalia, Mármol ubica la acción en 1840, cuando aún no había emigrado a Montevideo, momento que sin duda vislumbra como la crisis final del gobierno de Rosas en el momento en que escribe la novela. Esta aparece articulada desde la violencia. La violencia abre y cierra trágicamente el relato, comprendido en el corto período que transcurre entre la noche del 4 de mayo y la del 5 de octubre. Algunos críticos han vinculado a Amalia con la novela histórica; sin embargo no se ajusta a sus modalidades, pues no se remonta a un pasado lejano ni lo histórico funciona como mero telón de las acciones y conflictos. Corresponde considerarla novela política, pues lo político predomina no sólo en la historia narrada sino también en la composición del discurso narrativo.